«Estoy muy emocionada de venir a comprar mi uniforme y comenzar el curso, me gusta que me traigan a la tienda porque aquí también están mis amiguitas con su familia y comparto con ellas», dijo la pionera Érika, quien cursará el quinto grado, en la escuela “José Tey”, de esta ciudad de Banes. Ella estaba muy feliz porque junto a su mamá y su hermanito compraba el uniforme escolar, prenda que se expenden desde hace varias jornadas en la unidad 3091 «Los Locos», de este territorio.
La venta del uniforme escolar es un momento especial para las familias en que sus pinos nuevos inician en el mundo de las letras y los números en la enseñanza prescolar y también para los educandos del quinto grado se adentran en nuevos conocimientos.
«Mi niño va a comenzar prescolar, es la primera vez que irá a la escuela y todos estamos muy contentos, comprar su uniforme es motivo de alegría para mí, porque ya comienza una nueva etapa en la vida estudiantil,» dijo Gisela Martínez, madre de un infante de cinco años de edad.
Olga Tamayo es madre de una pionera de quinto grado y comentó que «cada vez que compro el uniforme me siento como el primer día cuando íbamos a comenzar prescolar, es un instante de alegría para todos en la casa, encontrar la talla correcta y ver cómo ha crecido mi hija me llena de satisfacción».
«Mi hijo José Antonio me espera ansioso en la casa para ver cómo le queda uniforme, siempre el inicio del curso es una fiesta para la familia cubana, y a pesar de las dificultades que atravesamos cada día, me siento feliz y agradecido con la Revolución por permitirnos este momento», señaló José Manuel padre de un estudiante.
Satisfacer las necesidades de la población y brindar un servicio de calidad es la máxima de los trabajadores del sector del comercio. Sobre las estrategias empleadas para agilizar las ventas y lograr este empeño refirió Hirlado Peña Castellanos, administrador de la unidad 3091 Los Locos: «Los integrantes de este colectivo laboral están insertados en este importante proceso. Entre las acciones que se realizan para lograr la rapidez en el servicio se destaca que varias dependientas estén a cargo de esta tarea para buscar en los listados por centro escolar, mostrar las tallas, expender está prenda y así evitar las aglomeraciones».
Los trabajadores del sector de la Educación también se vinculan a esta importante tarea. Enma Martínez Pérez, directora de la escuela primaria Carlos Manuel de Céspedes, expresó que «los educadores apoyamos este proceso porque sabemos la importancia que tiene para los pioneros y sus familias; es por ello que visitamos las tiendas para ver cómo marcha la venta, revisamos los listados para verificar que estén correctamente el nombre de cada estudiante y le brindamos nuestro apoyo a los trabajadores de Comercio para que todo salga bien».
El uniforme escolar permite que los estudiantes se identifiquen con su enseñanza y, como su nombre indica, posibilita la igualdad entre los educandos.
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